Javier Ugidos Alonso
Consideramos la inmigración como la llegada de personas a un país, procedentes de otro, con el
objeto de establecerse de forma prolongada en el país de acogida.
La inmigración es un tema de actualidad, ya que continuamente están llegando personas procedentes de diversos países a Europa, a menudo de manera ilegal y en condiciones inhumanas. Desde hace años ha habido un crecimiento importante de la inmigración, mientras que la población europea ha ido envejeciendo y sus tasas de natalidad han descendido. La inmigración puede ser la solución a este problema, pero debe ser una inmigración legal y regulada, mientras que hoy en día la mayor parte de la inmigración es ilegal. Es un negocio de mafias que se aprovechan de la necesidad de los naturales de algunos países. La inmigración (principalmente la ilegal) es un problema que concierne no solo a los países con fronteras exteriores, sino a todos los Estados miembros de la UE, pues una vez dentro los inmigrantes pueden moverse con más libertad por toda la UE.
Existen dos tipos de inmigración:
-Por causas políticas: En ciertos países con gobiernos autoritarios o no democráticos, algunas personas cuyas ideas son distintas a las del gobierno son perseguidos y encarcelados, por lo que se ven obligados, en los casos en que fuere factible, abandonar su país y solicitar asilo político. En estos casos su solicitud suele ser aceptada con más facilidad, si es un país contrario al régimen político del país del que huyen.
-Por causas económicas: En muchos países, hay una enorme falta de mercado laboral y una baja renta per cápita. Esto da lugar a que dichos países vivan en el umbral de la pobreza o en la miseria más horrorosa. Estamos hablando de gran parte de los países de África y algunos de Centroamérica y de Asia. Existe también una inmigración procedente de los países del este de Europa, aunque estos no se encuentren en tan precaria situación. Los habitantes de estos países que emigran buscan una mejor situación económica, y la alta renta per cápita de los países de la Unión Europea ejerce un “efecto llamada” que produce una inmigración masiva y a menudo ilegal.
ANÁLISIS
POLÍTICA ACTUAL DE INMIGRACIÓN
Actualmente no hay una política común sólida sobre inmigración que se cumpla en todos los Estados miembros sin excepción, sino que cada Estado tiene sus normas. En los últimos años se han hecho muchos progresos respecto a este ámbito, como pueden ser el Código de Fronteras Schengen y la creación de Frontex, pero todavía no podemos hablar de una política comunitaria. Cada país decide como encargarse del asunto sobre inmigración, pero siguiendo unas pautas ya impuestas por la Comunidad Europea.
Debemos destacar de nuevo dos diferenciaciones: Las leyes de asilo político y las concernientes al resto de inmigración.
Por el momento el acuerdo que hay sobre política de asilo entre los Estados miembros, así como a Noruega e Irlanda, es el Sistema Eurodac (reglamento (CE) nº 2725/2000, de 11 de Diciembre de 2000). El Sistema Eurodac especifica qué país debe examinar cada solicitud y los criterios que debe seguir, asegurándose de esta manera de que ninguna solicitud quede sin examinar, y de que no haya solicitantes pasando de un país a otro debido al desacuerdo entre países para hacerse cargo de dicha solicitud. Está basado en el Convenio de Dublín (actualizado posteriormente al Reglamento de Dublín) y en el Tratado de Ámsterdam. Recientemente se ha elaborado un “Libro Verde sobre el futuro sistema europeo común de asilo”, de 6 de Junio de 2007. El comienzo de este documento es el siguiente: “La creación de un Sistema Europeo Común de Asilo (SECA) como parte integrante de un espacio de libertad, seguridad y justicia partió de la idea de hacer de la Unión Europea un espacio único de protección de los refugiados basado en la plena e inclusiva aplicación del Convenio de Ginebra y en los valores humanitarios comunes que comparten todos los Estados miembros.” Este libro pretende ser la solución a las diferencias de criterio de aceptación de solicitudes de los distintos Estados miembros, instaurando unas directrices que todos deben seguir.
En las leyes referidas a los demás asuntos sobre inmigración es donde surge una mayor polémica. Cada país tiene una política diferente de la de los demás, donde varían desde los mecanismos contra la entrada ilegal hasta los derechos que poseen los extranjeros. En la UE se echa en falta una política común, pues es muy difícil compaginar el espacio Schengen, según el cual no existen fronteras interiores con distintas políticas de inmigración. Este sistema es igual que mezclar todas las leyes de todos los países, pues aunque no se pudiese legalizar en uno, podría hacerlo en otro y después pasar al primero. El problema es que mientras algunos países como los componentes del G6 (Grupo de los Seis: España, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Polonia) buscan una solución común, otros, como Alemania, presentan una firme oposición. A pesar de esto, la UE ha ido avanzando gracias a las reuniones con la Unión Africana, y las propuestas del G6, aunque a pasos muy pequeños.
INMIGRACIÓN ACTUAL
En la actualidad, los datos sobre inmigración en Europa no son más que meras aproximaciones, números difusos casi inexistentes, por lo que es difícil saber cual es la magnitud real de este fenómeno. Esto se debe al hecho de que a los gobiernos de los países no les interesa dar los datos concretos y a que es difícil determinar el número de ilegales que traspasa las fronteras. Lo que si sabemos es que el número de personas que llega a la UE es cada día mayor, y que los focos son principalmente cuatro: África, Asia, Sudamérica y Europa del este.
L a inmigración procedente de los llamados “Dragones Asiáticos” suele ser legal y no presenta grandes problemas de integración.
Uno de los problemas más importantes de inmigración son los de la inmigración ilegal, que es el caso de la mayoría de la procedente de África y de Europa del Este.
Las entradas a Europa para los originarios de África y Oriente Próximo son los países mediterráneos, donde a diario, cayucos y pateras desbordados de gente llegan a las costas o son rescatados por los servicios de guardacostas e incluso por pescadores. Estas personas pagan grandes cantidades de dinero a las mafias para poder montar en una de las deficientes embarcaciones que les ofrecen para llegar a Europa. Y si consiguen llegar, al no estar regularizados carecen de un medio de subsistencia y de los derechos públicos, teniendo que vivir de la caridad pública, del hurto o de empleos precarios y mal remunerados, casi en condiciones de semiesclavitud.
El problema de las mafias es mayor en el caso de Europa del Este, pues no solo introducen inmigrantes, esta vez en camiones escondidos entre las mercancías, que no es menos peligroso que lo anterior, sino que muchas operan también en los países de destino, recogiendo lo que los ilegales obtienen de la mendicidad y obligando a las mujeres a prostituirse.
Respecto a Sudamérica, hay inmigración tanto legal como ilegal, aunque la ilegal no es tan acusada como en los dos casos anteriores, debido a la distancia entre Europa y América.
Volumen de inmigrantes por región de origen que reciben Canadá, Japón, EEUU y la UE-27 + AELC
FRONTEX
FRONTEX es la Agencia Europea para la Gestión de la Cooperación Operativa en las Fronteras Exteriores de la Unión Europea (Reglamento (CE) nº 2007/2004 del Consejo (26.10.2004, DO L 349/25.11.2004, posteriormente modificado por el Reglamento (CE) nº 863/2007) tiene su sede en Varsovia. Fue concebido como un órgano independiente para que coordinase la cooperación entre los Estados miembros en el ámbito de la seguridad fronteriza. Se creó en2004, aunque no entró en funciones hasta 2005, y sus tareas más importantes son:
“FRONTEX coordina la cooperación operativa entre Estados miembros en el ámbito de la gestión de las fronteras exteriores; ayuda a los Estados miembros en la formación de los guardias fronterizos nacionales, incluido el establecimiento de normas comunes de formación; lleva a cabo análisis de riesgos; hace un seguimiento de la evolución en materia de investigación relacionada con el control y la vigilancia de las fronteras exteriores; asiste a los Estados miembros en circunstancias que requieren un aumento de la asistencia técnica y operativa en las fronteras exteriores; y proporciona a los Estados miembros el apoyo necesario para organizar operaciones conjuntas de retorno.”
(http://europa.eu/agencies/community_agencies/frontex/index_es.htm).
Al ser un organismo independiente, FRONTEX tiene un presupuesto autónomo, que procede fundamentalmente de la subvención de la Comunidad, pero también de la contribución financiera de los países asociados a la ejecución aplicación y desarrollo del acervo de Schengen, las tasas recibidas como pago a sus servicios y las donaciones voluntarias de los Estados miembros.
Si bien FRONTEX ha sido un gran avance en el ámbito de control de las fronteras exteriores, todavía es un organismo de poca antigüedad y relativamente débil.
NECESIDAD DE LA INMIGRACIÓN
Demografía:
Europa es un continente envejecido, con una tasa de natalidad bajo mínimos y un crecimiento natural que llega a ser negativo en algunos países. El relevo generacional se encuentra en 2,1 hijos por mujer y Europa está en 1,3. Actualmente la inmigración representa el 80% del crecimiento de población (http://www.cai.es/sestudios/pdf/estudios/21%20enero%202007%20Datos%20de%20la%20poblaci%C3%B3n%20de%20la%20Uni%C3%B3n%20Europea.pdf). Sin la inmigración Europa terminaría por desaparecer demográficamente hablando. Incluso con la inmigración podemos ver en el gráfico cómo Europa ha ido perdiendo población y se prevé que descienda aún más, al igual que otros países desarrollados como Estados Unidos y Canadá.
Fuente: http://homohominilupus.wordpress.com/2005/10/31/decae-la-natalidad-en-euros
Economía
La economía europea necesita de los inmigrantes para que se encarguen de puestos de trabajo para los que no hay efectivos suficientes o de los que los europeos no quieren ocuparse. Europa necesita mano de obra, debido a su bajo crecimiento natural. En España “Los trabajadores extranjeros han aportado el 50% del crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de los últimos cinco años y un 30% al de la última década.”, según el periódico El Mundo del día 15/11/2006.
5
CONCLUSIÓN Y MEDIDAS A TOMAR
La conclusión es que Europa necesita la inmigración para crecer, tanto demográfica como económicamente. Pero necesita una inmigración controlada y regulada, no la afluencia de masas de carácter ilegal que existe ahora mismo. Esta inmigración es una pérdida de recursos, pues la manutención de estas personas mientras son repatriadas, algo que tarda bastante en ocurrir, o mientras legalizan su situación y empiezan a cotizar en la Seguridad Social y a pagar impuestos, es una inversión perdida.
Las medidas a corto plazo deben ser el fortalecimiento de las fronteras exteriores, especialmente de las mediterráneas, por medio de FRONTEX, localizando a los inmigrantes ilegales de forma rápida y eficaz y repatriándolos en cortos períodos de tiempo, lo que nos conduce a una medida a medio plazo, los acuerdos con los países de origen y de tránsito, de los que hablaré más adelante. También habría que frenar las regularizaciones masivas como las llevadas a cabo en Italia y especialmente en España. De esta manera, el incremento del efecto llamada producido por la “facilidad” para llegar a Europa y regularizarse, será disminuido. Si todos los Estados colaboran es posible evitar la enorme cantidad de inmigrantes ilegales que traspasan las fronteras y acabar con las mafias que trafican con personas.
Medidas a medio plazo que deben llevarse a cabo son los acuerdos con los países de tránsito y de origen. En estos acuerdos se especificaría el número de inmigrantes que Europa necesita, que serían enviados en posesión de un contrato de trabajo y tendrían los mismos derechos y deberes que los nacionales, de forma parecida a que emigraron los españoles en el siglo XX. Pero también se acordaría la repatriación de los ilegales, y la intervención de la UE en esos países implicados con la finalidad de erradicar las mafias de tráfico de personas. Además se crearía un fondo de ayuda al desarrollo de los países emisores para que los naturales de esos países no tuviesen que emigrar como lo hacen.
A largo plazo, observando el desacuerdo actual entre los Estados miembros es difícil pensar que pueda suceder antes, dichos Estados deberían llegar a un consenso para elaborar una política de inmigración común, que seguirían todos los miembros sin excepción, fortaleciendo de esta manera el acervo Schengen. Con una política común a todos, la UE estaría más unida y sería más fuerte, que lo que se pretende desde su creación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario