DIRECTIVA DE RETORNO es la vergüenza de Europa ante los ojos del Mundo. Es la caza de la persona inmigrante o simplemente turista y supone la liquidación de los Derechos Humanos Universales.
Esta Directiva sobre la detención y la expulsión de las
personas extranjeras fue aprobada por el Parlamento Europeo, y previamente aprobada su redacción por los Gobiernos de la Unión Europea, incluido el mío, el Gobierno antisocialista, antiobrero e inhumano de Rodríguez Zapatero.
La Directiva de la Vergüenza se construye básicamente sobre dos medidas represivas: la generalización antidemocrática de encierro arbitrario hasta
18 meses de las personas sin papeles; y el retorno forzoso sin posibilidad de volver a pisar suelo europeo durante 5 años.
Europa se transforma en una fortaleza militarizada al tiempo que un paraíso para el movimiento de capitales, productos y servicios, y militariza y criminaliza el simple hecho de ser inmigrante sin recursos ni papeles o el simple hecho de ser turistas sin “Carta de Invitación” o de no disponer de 60 euros diarios para su tiempo de estancia, seres humanos que serán forzados a retornar, en unos casos sin posibilidad de
volver a pisar suelo europeo, como si de peligrosos delincuentes se tratase, y en otros casos negándoles su derecho a visitar a familiares o simplemente a visitar el país.
La Directiva de Retorno aprobada, constituye la expresión máxima del retroceso calculadamente diseñado por las élites políticas y económicas europeas en materia de Derechos Humanos. Esta agresión se
centra ahora en la legitimización de la inexistencia de Derechos para las personas inmigrantes, para quienes tenemos preparadas cárceles especiales sin garantías jurídicas y con tiempos de detención arbitrarios además del retorno forzoso sin posibilidad de volver en unos casos. Pero una vez dado este paso ¿quién asegura que en breve plazo no eliminen derechos fundamentales a quienes ostentamos el dudoso título de ser ciudadan@s?
Ahora con más ahínco y menos trabas las fuerzas de seguridad de los países de la UE podrán dedicarse con impunidad a la caza del inmigrante o turista, deporte
deleznable de tintes fascistas iniciado en la Italia del fascista Silvio Berlusconi, pero que con algo más de hipocresía el resto de países europeos está gustoso de
poner en práctica, incluido mi país, España. Ya estamos viendo las estadísticas de esta indigna y particular Olimpiadas, en las que se disputa el primer puesto de ser el país que más inmigrantes o turistas cace y expulse. Mucho nos tememos que los primeros puestos andarán entre el Reino de España y la República de
Italia.
Pero la vergüenza de esta DIRECTIVA DE RETORNO no la ostentan sólo los gobiernos y europarlamentari@s europe@s que la han aprobado, es sin duda la vergüenza de todas y todos, de quienes somos europe@s, de las sociedades embriagadas de consumismo y miedo, es la vergüenza de nuestra incapacidad para dar respuesta al capitalismo
totalitario de una UE, que más allá de la crisis provocada por el no irlandés al nuevo Tratado, está dispuesta a imponer su gobierno antidemocrático de las multinacionales y de las finanzas por encima de los
derechos y necesidades de las personas.
El problema no reside en la Directiva de Retorno, el problema es la UE como proyecto político del capitalismo
globalizado y esclavizador de países, pueblos, trabajadoras/es e inmigrantes. Los revolucionarios europeos nos seguimos preguntando "UE, ¿para qué?, ¿para quién?". Y las respuestas son desgraciadamente tozudas: para crear una superpotencia militarizada y
antidemocrática y para los ricos de la política, el comercio, la industria y las finanzas.
Unamos esfuerzos contra la UE del capital y la guerra, contra la precariedad y la exclusión, contra la distribución desigual de los derechos y de la riqueza. Este es nuestro único camino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario